Estimad@s Ripenses,

El 20 de diciembre, la democracia en España ha entrado en una nueva etapa. Con la entrada de nuevas opciones políticas en el Congreso, como Ciudadanos, ya no será posible gobernar desde el decreto y la falta de acuerdo.

En Ciudadanos empezamos hace un año un largo e ilusionante camino para hacer crecer a nivel nacional un proyecto de mejora de nuestro país desde el realismo y la sensatez, anteponiendo el argumento y la razón al sentimiento y la tradición. De ahora en adelante, los 40 nuevos Diputados de Ciudadanos que estarán presentes en las Cortes, harán realidad este sueño que compartimos millones de españoles.

En el análisis del resultado de Ciudadanos, como madrileños, nos sentimos especialmente orgullosos de la confianza que ha recibido nuestra formación en la Comunidad. En todos los municipios de Madrid, Ciudadanos ha mejorado sus resultados con respecto a las últimas elecciones municipales y esto, para nosotros, supone un aval y un impulso a la labor que estamos desarrollando los concejales y los Diputados autonómicos en toda la Comunidad de Madrid.

Quienes estamos convencidos del valor de la política útil, centrada en las soluciones antes que en la confrontación, no podemos estar más que agradecidos por habernos convertido en la tercera fuerza en la Región, consiguiendo incluso pasar de 5.940 votantes en mayo 2015 a 10.112 votantes el 20D en Rivas-Vaciamadrid.

Respecto a nuestro municipio Rivas-Vaciamadrid, Ciudadanos (C’s) ha incremento su voto del 14,53% en las pasadas elecciones autonómicas de mayo 2015 al 21,54% en las elecciones generales del 20 Diciembre, quedando como segunda fuerza política.

De igual forma los ripenses han apostado por una alta participación ciudadana en las elecciones generales con un 83,57% de participación, superando incluso en casi cuatro puntos el porcentaje obtenido en las últimas elecciones generales, y en nueve puntos el nivel de participación en los comicios autonómicos y municipales de mayo.

Es verdad que el resultado electoral en su conjunto hace difícil predecir con precisión cuál será la composición del nuevo gobierno de la nación. A pesar de la variación en el mapa político, el nacionalismo más radical amenaza, una vez más, con ser determinante a la vez que el populismo ha crecido en representación y apunta a seguir incrementando la demagogia de su discurso. Sin embargo, no deberíamos permitirnos seguir la senda de Grecia.

Si algo nos han pedido los ciudadanos en estas elecciones es diálogo pero, también, responsabilidad. Reducir las trabas al crecimiento económico, mejorar la sanidad y la educación y favorecer que todos los ciudadanos gocemos adecuadamente de los derechos fundamentales y de una vida digna, requiere trabajo y seriedad.

Y más allá de incertidumbres, si de algo pueden estar seguros, es de que en Ciudadanos no nos va a faltar de ninguna de las dos para poder cumplir con nuestro programa y, en definitiva, con el compromiso y el contrato ante el que nos presentamos a estas últimas elecciones generales para cambiar España a mejor, y para que seamos los propios vecinos y ciudadanos quienes lo consigamos.