Las sorpresas navideñas empezaron en el pleno. Nuestra moción sobre la “Implantación de un programa de mediación intercultural en Rivas Vaciamadrid”, no tuvo apoyo. ¿Por qué? Cada uno expuso sus razones pero la realidad es tozuda.

Nuestro grupo se reunió con el AMPA del colegio “El Olivar”, y sus representantes nos señalaron la necesidad de contar con un mediador cultural, que pusiera en contacto al colegio, con las problemáticas situaciones de las familias de hijos inmigrantes que estudian en el centro.

Esta moción, por mucho que el equipo de gobierno lo niegue, es una necesidad para los centros educativos del entorno de la cañada, y viene además recogido en el Plan de la Cañada Real y fue solicitada por el propio AMPA al consistorio ripense.

Nuestra moción no era bisoñez, ni respondía a un desconocimiento del tema educativo en nuestra localidad, todo lo contrario. Intentábamos solventar una situación que necesita de profesionales, y no solo de alumnos mediadores.

La segunda sorpresa se la llevaban esta Navidad nuestros vecinos de la plataforma de mayores. La necesidad de una residencia pública en Rivas Vaciamadrid es un tema abordado ya en varias ocasiones en pleno. En noviembre de 2015 se aprobaba la primera declaración institucional para solicitar esta infraestructura. En septiembre de 2016, volvíamos a mirar a nuestros mayores y aprobábamos integrar a Rivas dentro de la red de Ciudades amigables con las personas mayores, cuyo objetivo era ir sentando las bases para tener una ciudad, que sabiendo mirar al futuro, ha planificado unas infraestructuras acordes a las necesidades de nuestros mayores. En octubre de 2017 volvimos a apoyar la solicitud de una residencia pública en nuestro municipio.

Llega diciembre, y nuestros mayores conocen por una nota de prensa del Ayuntamiento que el suelo reservado para dicha infraestructura había sido devuelto por la Comunidad de Madrid. Hasta ahí no habría nada que reprochar al equipo de gobierno ¿no?, pues si, si lo hay. Este mismo equipo, que había manifestado a la plataforma su total apoyo, incluso en la concentración que llevaron a cabo el día 18 ante la Asamblea de Madrid, lo sabía desde el día 15 de noviembre, un mes antes.

Pero esto no es todo. Nuestros mayores preocupados por esta circunstancia han pedido el compromiso de todo el consistorio para dejar reservado este suelo, tienen el nuestro, pero a día de hoy, y en espera de lo que pase en el pleno, no lo tienen del equipo de gobierno.

Y vamos con medio ambiente. Pese a todas las reticencias que suscita en nuestro municipio la continuidad de funcionamiento de la planta de Valdemingómez, pese a que uno de los grupos que ahora compone el gobierno, en diciembre del 2015 incluía en una moción la petición de que “no hubiera ningún tipo de negociación, para volver a verter en Valdemingómez”, hemos vuelto a verter allí.

Donde dije digo, digo Diego